Una mujer pierde a su familia por el coronavirus.
Aunque nuestra sociedad haya evolucionado sorprendentemente en los últimos años y los avances científicos sean cada vez más efectivos, hay cosas que no están predestinadas. En el transcurso del presente año se ha originado una de las problemáticas más influyentes del siglo para la humanidad con el brote del coronavirus que causa el Covid-19. Sin duda, la propagación del mismo como pandemia ha contagiado a millones y cobrado la vida de cientos de miles, especialmente en los países donde el sistema sanitario es muy frágil.
Recientemente, se difundió una noticia de una mujer proveniente de Guayaquil, Ecuador, la cual relató terriblemente afectada que había perdido a sus familiares a raíz del contagio del virus, situación que ha conmovido a miles de personas.
Paulina Carvajal, vive una pesadilla gracias a la situación generada por la pandemia. El pasado 23 de marzo, mientras todo estaba en la normalidad y cumpliendo las medidas de confinamiento, el esposo de Paulina, quien sufría de diabetes comenzó a presentar síntomas de Covid-19, sin embargo, prefirieron no alarmarse y esperar hasta el siguiente día, pero lamentablemente todo fue peor. Su respiración se veía cada vez más difícil y decidieron llevarlo inmediatamente al hospital. Cuando llegaron a las instalaciones, el equipo médico los atendió tan pronto llegaron, le colocaron suero intravenoso para controlar sus niveles de azúcar en la sangre.
Al cabo de unas horas, éste se encontraba ya estable y había sido dado de alta, pero aún tenía síntomas de dificultad para respirar. Al notar el desespero del personal del hospital el desespero de su esposa fue mayor, por lo que tuvieron que recurrir a otro centro de salud cercano, donde lamentablemente había quedado sin oxígeno. Pero ésto no fue suficiente para ésta pobre mujer, la cual recibió después una llamada de su hermana, quien le había informado que su padre, de 77 años, también estaba en graves condiciones de salud, internado en un hospital por la misma enfermedad.
Ambas personas fallecieron a los dos días. «Fue horrible, jamás imaginé algo así», dijo Paulina.
Ésta terrible tragedia aún no termina.
El triste duelo de ésta mujer aún no había terminado, cuando a los pocos días, el hermano y la madre de Paulina también comenzaron a manifestar los síntomas. Fue allí cuando comenzaron a empeorar hasta fallecer en un par de días.
En total, fueron cuatro miembros de ésta familia ecuatoriana los que perdieron la vida, devastando a una mujer que sigue luchando por su vida con sus hijas, razón por la cual aún sigue de pie soportando tanto dolor.
“Si no hubiese tenido a mis hijas, a lo mejor no habría luchado por mi vida y, sinceramente, habría dejado que Dios me llevara”, expresó en medio de tanta tristeza.