Tips para transformar el gasto hormiga en ahorro
La pandemia del nuevo coronavirus no debería ser el único justificante para llevar a cabo ciertos cambios en el plano financiero. Evidentemente nos hemos visto afectados en todos los sentidos y lo peor de todo es que muchos no estábamos preparados para asumir esta nueva situación y recortar ciertos gastos, particularmente aquellos pequeños que sin darnos cuenta, muchas veces podrían repercutir negativamente en nuestra situación económica.
Hay ciertos gastos que se llevan a cabo con frecuencia y están relacionados con antojos o caprichos que nos inducen a pagar cantidades de dinero considerables a lo largo del mes. Lo que pretendemos no es limitarte a no darte ningún gusto, sino más bien organizar tus finanzas mediante un presupuesto y evitar esos gastos hormiga que podrían ser destinados para el pago de otros servicios prioritarios o bien, el ahorro. Sin más preámbulo, te indicamos algunas sugerencias a seguir para transformar el gasto hormiga en oportunidades de ahorro:
- Lleva un control diario de cada uno de tus gastos en caprichos o antojos.
- Suma todos los gastos relacionados a este tipo y calcula esta cantidad por lapsos de tiempo de un mes y un año. Luego, piensa lo que podrías hacer con ese dinero ahorrándolo en lugar de gastarlo.
- Puedes incluso recortar ciertos gastos haciendo cosas por ti mismo. Por ejemplo, podrías prepararte el café en lugar de ir a comprarlo a la cafetería. Si no almuerzas en casa, puedes optar por llevar un refrigerio al trabajo, así no tendrás que gastar para comer en la calle.
- Compara muy bien los precios antes de comprar.
- Al momento de comprar algo, es importante que consideres gastar un poco más por un producto original y no en algo que pueda durarte poco y te implique un gasto mayor.
- Evita comprar productos desechables como platos, cubiertos, etc.
- Elabora un presupuesto y define nuevas metas en función del ahorro y la inversión.
- Analiza cómo podrías ajustar el consumo de tu familia de acuerdo a tu presupuesto.
- Hay ciertas instituciones bancarias que disponen de apps móviles con las que puedes ahorrar separando tu dinero.

Un ejemplo de un gasto hormiga…
Suponiendo que un café común cuesta 1 dólar. Si sacamos el costo de una semana, estarías gastando 7 dólares. En el transcurso de un mes serían unos 28 dólares aproximadamente y finalmente, en un año, estarías acumulando casi 350 dólares, una cantidad de dinero que bien podrías haber destinado para efectuar la compra de un nuevo smartphone, por ejemplo.
Como puedes ver, los gastos hormiga pueden hacernos perder mucho dinero, tal vez no de un día para otro, pero con el paso del tiempo, podríamos haber tomado mejores decisiones financieras. Sin embargo, nunca es tarde para comenzar a implementar mejores hábitos. Por lo pronto, esperemos que sigas las recomendaciones expuestas anteriormente y logres transformar este impulso negativo en ahorro u otro fin que te beneficie a largo plazo.