Disminuir el consumo de carne puede favorecer al Amazonas

El hombre es el peor verdugo y enemigo de la naturaleza. Por años, ha asesinado diversas especies de animales, a veces para subsistir pero en muchas ocasiones solo para satisfacer una diversión o hobby. Además de la tala de árboles, excesiva contaminación y tantas otras cosas que van aniquilando poco a como lo que conocemos como hogar: nuestro mundo y el medio ambiente. Hay una zona bastante rica y extensa en biodiversidad, diferentes tipos de especies de animales, de fauna y flora que la hacen una joya para la humanidad y una gran contribuyente a la estabilidad natural del mundo. ¿De quién hablamos? De la Amazonas, que desde hace varios años está en peligro.

Ella es la mayor selva tropical de todo el mundo. Cuenta con alrededor de 6 millones de kilómetros al cuadro. Y es que abarca 9 países de entre centro y sur América. Se le denomina, con toda razón, el pulmón de la tierra, pues nos da el 20 porciento de todo el oxígeno que consumimos y ayuda a la descarboxilación de la capa de ozono. En ella residen no sólo hermosos animales sino que es el hogar de distintos aborígenes en los diferentes países que la componen.

A pesar de dar tanto al mundo por sus riquezas, las grandes empresas e industrias la explotan de forma indiscriminada, sin conciencia y riesgosa. Todo esto con la ayuda y el apoyo de algunos gobiernos inescrupulosos, orientados por el poder y el dinero, más que por el bienestar común y la preservación del ambiente.Las 2 principales razones por la que se destruye la AmazonasLa primera causa que fomenta el desastre ecológico en ésta rica y extensa selva, es la gran demanda de carne animal, que al pasar el tiempo se incrementa desmedidamente. Y, ¿Qué es lo que sucede? Las empresas que comercializan carne, se apropian de los terrenos de la amazonia y comienzan la tala de árboles, donde posteriormente van a criar y engordar al ganado. Dichas empresas, a pesar del daño que van causando, ni siquiera tienen la iniciativa de crear un programa de sembrada de árboles. Sólo están por sus propios intereses. Y somos los seres humanos los que propiciamos la inmensa demanda de carne. Por este motivo, invitamos a la población mundial, a disminuir el consumo de carne, cosa que ayudaría muchísimo a reducir las heridas que se le ha hecho al Amazonas.La segunda causa es el cultivo de soja, que está unida a la cría de animales, pues con él se engorda a los pollos, cerdos y vacas. No sólo de Brasil o el resto de los países en los cuales se extiende el Amazonas, sino el resto de los países del mundo y sus empresas de producción de carne. Al menos en Brasil se exporta gran cantidad de soja para muchos países de Europa.El resto de la humanidad, que no tiene nada que ver con mencionadas empresas, podemos tener como meta para contribuir al Amazonas, que nos da y seguirá dando tanto, disminuir en nuestra dieta la carne y reemplazarla por alimentos que tengan los mismos nutrientes pero que no propicien la destrucción de ésta magnífica reserva de naturaleza.