Cifras de coronavirus en China no podrían coincidir con las oficiales.

Desde que el Estado existe y tiene tanto control sobre la sociedad en cuanto a la información y toma de decisiones, han imperado las mentiras y los encubrimientos de la realidad y las verdades. Un claro ejemplo de esto, es la tragedia atómica de Chernobyl, quiénes las autoridades del Estado reportaron 36 fallecidos oficialmente, mientras que las cifras que corresponden a la realidad es de casi 100.000 muertes. Pero, sin ir muy lejos, hoy en día sucede lo mismo en esta situación en la que nos ha sumergido el coronavirus.

Un estudio que realizaron expertos estadounidenses de la Universidad de Washington y de la Universidad Estatal de Ohio y la empresa de comunicaciones estadounidense AT&T. ha arrojado que, el país dónde surgió el virus, covid-19, y el cual posteriormente esparció por el mundo ha ocultado información acerca de este. China ha mentido a la humanidad. La investigación ha sido muy práctica, pues se trata de examinar el incremento de las cifras de los crematorios en las ciudades más afectadas de esa nación, en los meses desde el inicio de la pandemia hasta la actualidad.

De este modo, los resultados muestran que solamente en la ciudad Wuhán para febrero, primer epicentro de la infección, se realizaron de 800 a 2.000 cremaciones, teniendo en cuenta que la cifra oficial de fallecidos era de unas 700 personas muertas para esa fecha.

Es importante decir que los crematorios de Wuhan, al menos 86 de ellos, están funcionando las 24 del día y a toda potencia, ese número solo en esa ciudad, sin contar afuera de esas limitaciones. Éste gran equipo que da informaciones muy valiosas ha expresado lo siguiente: “Las estimaciones acumuladas, basadas tanto en la distribución de urnas funerarias como en el funcionamiento continuo a plena capacidad de los servicios de cremación hasta el 23 de marzo de 2020, dan resultados de alrededor de 36.000 muertes, más de 10 veces el número oficial, que para entonces fue de 2.524”.China, que está presidido por un régimen comunista, da una cifra total de 83.265 personas que contrageron el virus y 4.634 fallecidos. De dichos números el 98% pertenece a la provincia de Hubei, que tiene como capital Wuhán. El estudio denuncia, según el conteo de las urnas usadas desde el año pasado y la actividad de los crematorios un aumento exponencial de las víctimas fatales, agregándole también que las autoridades de China no han sido transparentes a la hora de dar información sobre su situación y el número total a los demás países y a la Organización Mundial de la Salud.

Aunque la acusación más fuerte expresa que el virus se originó en el instituto de Virología de Wuhán, es decir que no fue casualidad, sino algo maquinado. Diciendo además el estudio, que el gobierno de China, desapareció a personas que poseían información, especialmente los que trabajan en el medio de la salud.